29 de noviembre de 2010

El alfabeto visual



Lenguaje, la insistencia para decir:

Piedra/Flor

Ciudad/Sujeto

Lo promiscuo/ Lo íntimo

Lo perpetuo/Lo frágil

La necesidad humana de recordar, el ancla con el pasado y el reconocimiento de éste para construir presente.

El cementerio como un espacio que expresa la voluntad ritual del humano, su necesidad de apego para arraigarse y construir cultura.

El levantar una piedra es un desafío; elevar para conmemora la presencia y dirigir al cielo expresa un estado de conciencia y una manera de nombrar.

Otro signo interesante que observé en el cementerio fue el constante contraste de la piedra eterna, firme y, sobre ella, la fragilidad de una flor.

La máxima vitalidad arrancada y dejada para marchitar como signo de la naturaleza de la vida humana.

La fuerza de la presencia transitoria.

El cementerio se tornó un espacio lleno de significados junto con su entorno de nuevas construcciones. El diálogo del casco antiguo y los nuevos edificios similares a los nichos comunes.

El momento para entender la razón primera de la escultura y cómo podía volverse ese impulso un signo gráfico que nombraré este ritual.

El paisaje es fundamental como constructor de imaginación.

Uno imagina según lo que ha vivido o imagina en contraste con lo que recuerda.

Impronta



La impronta desde el dibujo contiene síntesis y expresión al unísono. La ilustración, el cómic, el mundo fantástico, la ciencia ficción y las técnicas de animación clásicas generadas por computadoras son campos que legitiman actualmente el dibujo.

Vivimos en una época de imágenes sustentadas por el consumo. La publicidad acapara los espacios urbanos destinados para imágenes y dictan el consumo de las supuestas necesidades. El poder comunicativo de las imágenes es innegable y plantearse ser productor de ellas en un paisaje saturado de éstas, constituyen para esta obra un acto de emancipación al utilizar el dibujo como el elemento principal de interpretación cognitiva y como elemento estético. E invita a la reflexión en torno a la construcción del lenguaje desde un punto de vista denominativo como es el lenguaje que nuestras culturas utilizan después de la conquista. El uso de signos, de significantes, que por medio de la reiteración son asociados a significados.

Conciencia de lo que ha sido




Antiguamente, en Occidente, fue la pintura la manera de plasmar la realidad, como lo fueron las bitácoras para la ciencia empírica. Luego, con la fotografía, se plasma el instante, quitándole la hegemonía a la pintura y al dibujo. Su práctica, se va alejando de las necesidades funcionales que tiene para los individuos el aprehender la realidad desde este método, que implica tiempo, reflexión, constancia y pensamiento crítico.

El dibujo (como expresión) del pensamiento



El paisaje simbólico tiene como cimientos el dibujo y la palabra, en tanto desprendimientos de la conciencia que materializan la memoria. Memoria es imaginación más realidad. La posibilidad de imaginar y plasmar las ideas con riqueza expresiva y valor conceptual.

El dibujo en esta obra está absolutamente ligado al pensamiento y a la creatividad como, también, a la comprensión imaginaria e intelectual de textos teóricos.

El dibujo, como sistema y búsqueda, permite desarrollar una obra de nivel conceptual y estético que da lugar a la construcción de un lenguaje. Mi propuesta toma el dibujo, el paisaje, el pensamiento, la imaginación y la capacidad para crear signos, como los elementos de fortaleza para la creación de la poética y, a la vez señala la falta de dibujo como herramienta para la construcción de realidad.

Temple invernal



El cementerio en invierno, el bullicio urbano, el ruido de construcciones cercanas, el cambio del entorno, la humedad del lugar, las procesiones constantes, lo inquietante en la supuesta quietud, produjeron
un tenor melancólico en el desarrollo de la obra que terminó siendo un acto de remembranza en su concepción.

En el hábitat de estas reflexiones, la ciudad se vuelve un escenario tan significante como mutante en el presente. Un cambio que está en el ahora, que está sucediendo en el paisaje de toda la ciudad.

La propuesta de ciudad contemporánea no parece nítida, no se percibe la armonía entre el pasado, el presente y, por ello, es difícil avizorar un futuro.

El paisaje constructor de imaginación



Durante el invierno 2009 tuve la tarea de ir a dibujar al Cementerio General, ubicado en la comuna de Recoleta Santiago de Chile.

Estos lugares de cemento son hitos de memoria y tienen una conexión directa con la existencia de la escultura.

Son espacios cargados de signos: levantar una piedra y posar una flor es un acto poético.

De este lugar obtuve recursos para construir un alfabeto visual que me permitiría indicar una acción conmemorativa usando la representación de los signos que reiterativamente se presentan en un cementerio.

Paisaje simbólico, catalogar



¿Qué conforma la identidad?
¿Qué identifica a una cultura?
¿Cómo se manifiesta esta identidad en la cultura?
¿Qué valor tiene el ritual para la identidad?

¿Qué asociación hay entre la característica ritual humana y la concepción de las artes?

¿Qué posibilidad tiene el arte hoy para hablar de significados espirituales?

¿Qué relación hay entre la identidad, la memoria, la cultura y el paisaje?


Estas preguntas envuelven el proceso creativo del paisaje simbólico.

Un proceso de búsqueda y de desplazamiento de significados donde la observación, el estudio y la asociación es un método para la creación de una poética, de un alfabeto y un lenguaje.